Corazón Distante de la Doncella
La flor de la Doncella. Tan desenfadada y elegante como su dueña.Es un ejemplar extinto en los registros escritos.La Doncella describía su uso en una historia que leía incontables veces:La damisela en apuros y el inocente caballero blancointercambiaban bendiciones por medio de flores.Aunque el corazón de la Doncella se marchitaba como las flores,esta en particular sigue intacta hasta el día de hoy.Esto se debe a que su corazón se detuvo en el momentoen el que conoció al caballero.
Belleza Desvanecida de la Doncella
Aun cuando estaba rodeada de las flores de sus pretendientes,la Doncella nunca se quitaba el sombrero para admirarlas.Sus nombres y rostros no eran dignos de recordar.Durante años, al final de cada día,ella se sacudía el polvo de su sombrero.Pero lo que permanecía era el polvo en su rostro.A medida que pasó el tiempo, cada vez la visitaron menos pretendientes con flores.Su corazón se había detenido aquel día en el pasado.
Pasatiempo de la Doncella
El juego de té más preciado de la Doncella.Alguna vez estuvo lleno de elegante té negro.Mientras degustaba pastelillos y té,el mundo exterior le dejaba de importar. Tal era su privilegio como Doncella.“Lo único que quiero es que esta flor sea mi medalla”,le dijo el caballero el día que se conocieron.“Pero mi corazón ya...”.No terminar su confesión también era un privilegio de la Doncella,pero también era la jaula de oro que la mantenía presa.
Recuerdos de la Doncella
Un adorno de plumas viejo pero delicado.Los años lo han cubierto de muchas capas de polvo.Desde que conoció al caballero, el reloj de la Doncella había dejado de funcionar.Ya nada le importaba, ni siquiera el amor ni la juventud.Ella siempre lo buscó en regiones perdidas, como un pájaro sin nido al que aferrarse.Rezó para que su amor llegara al caballero,pero él estaba devotamente dedicado a la caballería.En tierras lejanas donde antiguos imperios se derrumbaron,¿encontrará el caballero los paisajes con los que la Doncella soñó?
Juventud Pasajera de la Doncella
Una precisa obra de relojería que, indiferente a los sentimientos de su dueña,mostraba impasible el paso indefinido del tiempo.Aunque el tiempo de la Doncella llegó a su fin,su espera nunca terminó.La manecilla del reloj daba vueltas día tras día,igual que el recuerdo atesorado en la memoria de su dueña.Años después, seguía recordando al caballero que conoció años atrás.Aquel caballero blanco que la conoció; aquel que había estado esperando desde entonces.